Imaginar el después en Casa Nacional del Bicentenario

POST. Imaginar el después
Boba, Fábrica de Estampas, Pablo Rosales, Ivana Vollaro
Casa Nacional del Bicentenario
15.01.21 | 26.06.21

El Museo Nacional del Grabado presenta POST. Imaginar el después en la Casa Nacional del Bicentenario (CNB). Con curaduría de Silvia Dolinko y Cristina Blanco −directora del museo−, la muestra reúne obras de Pablo Rosales (Buenos Aires, 1977), Ivana Vollaro (Buenos Aires, 1971) y los colectivos boba (Lucía Álvarez, Verónica Capasso, Matías David López, Dani Lorenzo, Marina Panfili, Tatiana Staroselsky y Alicia Valente, desde 2015) y Fábrica de Estampas (Delfina Estrada y Victoria Volpini, desde 2011). El proyecto comenzó en junio de 2020, durante el período de aislamiento social debido a la pandemia de covid-19, como un conjunto de sesiones de experimentación gráfica compartidas en redes sociales que se desarrollaron hasta el mes de agosto. Luego continuó con una serie de intervenciones sobre la fachada del edificio de la CNB y, actualmente, en esta tercera etapa, con la presentación de obras que pueden recorrerse en las salas de la planta baja. La exposición formará parte de Transformación. La gráfica en desborde, una propuesta sobre arte gráfico contemporáneo que ocupará el resto del edificio desde el 26 de febrero hasta el 31 de julio de 2021. Para visitarlas se requiere reservar previamente una entrada y seguir el protocolo sanitario. 

A la inversa de otros proyectos exhibitivos que se vieron obligados a adoptar un formato virtual, POST… comenzó como una iniciativa digital para materializarse después en una muestra presencial. “Como punto de partida −señalan las curadoras en su texto−, formulamos algunas preguntas como expresión de un estado de desajuste y alteración nunca antes experimentado: ¿cuáles serán las marcas que dejará el aislamiento en nuestros cuerpos?, ¿cómo se reconfigurarán las ideas de proximidad y afecto en tiempos de asepsia?, ¿qué modos conllevará lo impreso y qué lugares ocupará?”. A partir de estas formulaciones, cada participante elaboró cinco breves videos, que la CNB difundió a través de su página web y de sus cuentas de YouTube, Instagram, Twitter (ver+info)

En una segunda etapa, que coincidió con la reapertura de la Casa al público, cada artista o colectivo produjo una gigantografía para cubrir una de las vidrieras sobre la calle Riobamba. Cada una de ellas permaneció expuesta durante aproximadamente quince días. Por último, la muestra funciona “a modo de conclusión de los respectivos recorridos realizados en la etapa virtual del proyecto, imágenes materializadas en afiches, banderas estarcidas, sellados sobre papel o sobre muro, entre otras formas de lo impreso”, sintetiza el Museo Nacional del Grabado.

El recorrido comienza con una instalación en la sala más próxima a la entrada, donde el colectivo platense boba cubre las paredes con material impreso en diferente tipo de superficies y formando objetos como banners, afiches y revistas que interpelan con palabras e imágenes sobre temáticas sociales, postulando, por ejemplo, “nos organizamos o desaparecemos” o preguntando “en tu casa, ¿quién cuida?”, haciendo alusión a los roles de género naturalizados. Un monitor reproduce los videos fruto de la primera etapa, basados en relatos de ciencia ficción. Fábrica de Estampas, un  colectivo con taller de impresión en el barrio de Coghlan, exhibe una serie de monocopias sobre tela de arpillera que funcionan como banderas para proyectos surgidos en cuarentena en diferentes barrios: Cocinas abiertas en Saavedra, Olla popular Migrantas, Libro en el barrio, Barrio Mitre y El teje San Martín, Red de cuidados travestis, para mencionar algunas. Ivana Vollaro reflexiona sobre la temporalidad en épocas de aislamiento con sus obras El tiempo entre paréntesis (2021), una intervención de sellos sobre muro en que superpone múltiples versiones de un semicírculo como el que suele verse girar sobre las pantallas cuando una página web está saturada y tarda en cargar. Sobre otra pared, la misma forma geométrica se proyecta aparentando desplazarse (20/20, video monocanal, 2021). Mientras tanto, otra instalación de la artista presenta un display de tarjetas postales impresas con las frases más frecuentes del período de cuarentena: “Por el momento no podemos atenderte” o “Nuestro servicio se encuentra momentáneamente afectado” (Sala de espera, 2021). Pablo Rosales, por su parte, realizó Todo copia (2021), un gran “mural empapelado” −así lo denomina−que combina impresión digital, cuerda sobre papel y madera y sellos de goma. Estos últimos −aclara − “fueron apareciendo en las sesiones de experimentación gráfica” de la etapa virtual.  

El texto curatorial define como las principales “ideas-fuerza” de las obras “la alteración de las coordenadas espacio-tiempo, la reconfiguración de las fronteras entre el adentro y el afuera, la preeminencia de lo virtual, la pregunta sobre el ‘post’ de la pandemia, el formato ‘posteo’ como edición, las revisiones de lo público y lo colectivo”. El conjunto, además, “propone nuevos interrogantes que, situados en este presente incierto, permiten seguir abriendo preguntas en torno al futuro”.