
Publicado por Fundación arteba el 11/04/2022 Reseñas relacionadas ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() |
Diego Bianchi en el CA2M19.02.22 | 15.05.22 - Táctica Sintáctica ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() Táctica Sintáctica Con curaduría de Mariano Mayer, Diego Bianchi (Buenos Aires, 1969) presenta Táctica Sintáctica, su primera exhibición individual en Europa, en el marco del ciclo “Doblar la voz. Lecturas de artista a los fondos del Museo Centro de Arte Dos de Mayo” (CA2M). Esta propuesta invita regularmente a un artista a realizar una muestra con piezas del patrimonio del museo y combina así la posibilidad de exhibir las obras de su colección y convocar a artistas contemporáneos para muestras individuales, entendiendo a su acervo no como un fin en sí mismo sino “como potencialidad de producción de nuevas obras artísticas” –sostiene el museo–. En su trabajo, Bianchi suele recurrir a lo que denomina “informe basurero cotidiano”, del que selecciona “restos capaces de alcanzar otro grado de atención”, como cajas de cartón para televisores, escarbadientes de madera, objetos descartables, encontrados, rotos o donados. Este conjunto de materiales perecederos y detritus funciona en el contexto de su obra como “una reivindicación de la incertidumbre y lo inconcluso” –sigue el CA2M– en un “continuo entre materialidades, acciones y afectividades” que conforman la realidad con la cual experimenta el artista. Estas operaciones producen una reflexión “sobre los objetos triviales que acompañan nuestra vida, los procesos continuos de producción y deterioro, la fragilidad y la memoria”. En Táctica Sintáctica, Bianchi incorpora como material-soporte una selección de piezas de la Colección Museo CA2M y de la Colección Fundación ARCO, en lo que constituye, para él, una oportunidad de igualar estos objetos de arte a los objetos cotidianos que suele utilizar en la elaboración de sus propias obras. En este contexto, cuenta que “la aproximación… fue totalmente intuitiva”. Por su parte, el curador destaca que la selección se realizó “desde un lugar no narrativo, no contextual, no discursivo, sin ningún tipo de argumento mayor que lo que está sucediendo en esa primera instancia de reconocimiento de una obra: las obras empezaron a actuar, empezaron a convertirse en cosas, en cosas del mundo, a encontrar su lugar, a posicionarse de algún modo y a plantear posibilidades de continuación, de extensión, de continuar esas ideas, que son las que, de alguna manera, han germinado en las esculturas de Diego Bianchi, que Diego ha realizado en Madrid” y que, en muchos casos, sostienen o alojan a las obras expuestas. |